Tipos de Evaluación

•  Evaluación Diagnóstica:

Es la que se realiza con la intención de obtener información precisa, que permite identificar el grado de adecuación de las capacidades cognitivas generales y específicas de las (os) estudiantes en relación con el programa pedagógico al que se van a incorporar. La evaluación diagnóstica ayuda a la o el docente a determinar antes de iniciar cada etapa del proceso enseñanza – aprendizaje, si las (os) estudiantes poseen las condiciones que se requieren para emprender los nuevos aprendizajes. Permite determinar en cuales tienen conocimientos previos.

Se emplea también para detectar problemas físicos (audición, visión, etc.), de aprendizaje o de otro tipo que pueden impedir el aprovechamiento educativo, lo que implicaría ofrecer la ayuda pedagógica, médica, psicológica o de cualquier otra índole que el caso requiera, además, permite descubrir necesidades, limitaciones, habilidades y situaciones especiales propias de cada estudiante, que al ser descuidadas ponen en juego los resultados del aprendizaje y la adaptación al medio educativo.

Conduce a la obtención de información global, que se expresa en un expediente a fin de tener la visión de lo que sucede a las (os) estudiantes al inicio de cada experiencia de aprendizaje readecuando los contenidos programáticos.

En este tipo de evaluación, se pueden aplicar una serie de técnicas e instrumentos como pruebas exploratorias, observación, escalas y listas de cotejo u otras que sean pertinentes a las situaciones de aprendizaje.

•   Evaluación Formativa o de Proceso

Se lleva a cabo a lo largo del proceso de enseñanza – aprendizaje, mediante la observación sistemática del desarrollo de capacidades, habilidades, destrezas, actitudes y aptitudes, a partir de registro de las observaciones en instrumentos adecuados y de la interpretación de las mismas.

La evaluación formativa es una evaluación continua y su finalidad es conocer que logros y dificultades de aprendizaje tiene el estudiante, su función es facilitarle ayuda adecuada y oportuna. Este tipo de evaluación es fundamental,  lo más  importante es el progreso de cada estudiante al máximo de sus posibilidades y potencialidades, requiere observación constante en el proceso de aprendizaje, lo que significa anotar toda la información obtenida y brindar ayuda a aquellos(as) estudiantes que la requieren en el momento oportuno.

La evaluación formativa se auxilia de la autoevaluación y la heteroevaluación. La autoevaluación  permite que las (os) estudiantes se evalúen a si mismos como una forma de responsabilizarse de su proceso de aprendizaje y controlar su progreso. Esta forma democrática de evaluación permite además, valorar sus cualidades personales y sociales. La heteroevaluación permite valorar el trabajo en equipo y las experiencias de aprendizaje dentro y fuera de aula, con el propósito de observar las cualidades sociales, el esfuerzo y la colaboración prestada a un trabajo conjunto, la práctica de la autoevaluación y de la heteroevaluación requiere de orientación adecuada y de criterios claros para que las y los estudiantes valoren el grado de progreso en las experiencias de aprendizaje.

•  Evaluación Sumativa:

La evaluación sumativa permite comprobar y certificar el aprendizaje global logrado por las (os) estudiantes, al término de los diferentes períodos o de una experiencia de aprendizaje, considera tanto el proceso y los procedimientos  realizados como también el producto de la experiencia de aprendizaje evaluada y       requiere de observaciones, registros e interpretación de las manifestaciones de las (os) estudiantes en diferente situaciones de aprendizaje.

 Necesita de la aplicación de adecuados instrumentos de medición de análisis y emisión de juicios válidos acerca de los resultados que estos arrojan. Para comprender el término de evaluación en el proceso enseñanza aprendizaje, es conveniente ver la educación como un proceso sistemático, destinado a lograr cambios duraderos y positivos en la conducta de los estudiantes, tomando como referencia los objetivos que se pretenden alcanzar. Entendida la evaluación como una etapa del proceso educacional que tiene como finalidad comprobar sistemáticamente en qué medida se ha logrado los objetivos previamente fijados. La evaluación posee un sentido amplio, va más allá de la medición, podemos decir con propiedad que la evaluación es la interpretación de la o las medidas en relación a una norma establecida, no es sólo medida, sino también descripciones cualitativas en las (os) estudiantes, como cuando decimos la señorita Díaz es responsable, de ahí que tanto las mediciones cuantitativas como las descripciones cualitativas son interpretadas, dando como resultado un juicio de valor.

 Anteriormente la evaluación se entendía cómo medir los aprendizajes, en el sentido amplio evaluación puede considerarse como el “proceso que permite identificar, delimitar, obtener, procurar cualquier información que pueda contribuir a elegir alternativas de solución”, emitir un juicio de valor acerca del atributo en consideración, y tomar una decisión en relación a los objetivos propuestos.

  Considerando la importancia de la evaluación para la toma de decisiones, se define como el proceso de obtención de información y de su uso para formular juicios que a su vez se utilizarán para tomar decisiones, la interdependencia de estos tres conceptos, información, juicio y decisiones define esencialmente la evaluación.